23 febrero, 2022

Importancia de las visitas ginecológicas

Es recomendable establecer una rutina y visitar a la ginecóloga o ginecólogo al menos una vez al año.


Si bien la primera visita al ginecólogo puede realizarse a edad temprana, usualmente al presentarse algún problema con la menstruación, es obligatorio ir a consulta cuando se ha iniciado la vida sexual, ya que la paciente debe realizarse exámenes como el Papanicolaou, para la prevención del cáncer de cuello uterino.
Para un control más completo, se puede complementar con ecografías transvaginales o pélvicas, así como ecografías de mamas o mamografías, según la edad.

Es importante que el médico le brinde a la paciente toda la confianza posible para que pueda hablarle sobre sus molestias, síntomas o antecedentes, y ella debe ser sincera al responder estas consultas, ya que así se podrán recomendar los estudios necesarios para el descarte de determinadas patologías. Si la paciente no se siente cómoda con su médico, entonces debe considerar otras opciones. La confianza es la base para establecer una buena relación con su ginecólogo, la cual idealmente conservará a lo largo de toda su vida.

Las personas gestantes deben iniciar sus controles a partir de la sexta semana desde la fecha de la última menstruación.

Ante la primera sospecha de embarazo, tenés que realizar la primera consulta médica para comenzar cuanto antes con los cuidados y controles.

Los controles son fundamentales para monitorear el normal desarrollo de tu embarazo y prevenir y superar eventuales complicaciones, y para acompañarte adecuadamente en la preparación para el parto y la lactancia materna.

Además, los controles son una buena oportunidad para que vos y tu pareja se informen acerca de todo lo que puede ocurrir en el momento del parto. En muchos centros de salud se brindan charlas informativas.