Durante el recorrido que realizó el ministro de Salud Pública, doctor Luis Medina Ruiz, la doctora Alejandra Carmona, jefa del CAPS de Chuscha que corresponde al Área Operativa Trancas, contó que, al ser consultora internacional de lactancia, lo que intenta hacer es que las madres se informen sobre la capacidad gástrica (de leche materna) de los bebés, es decir cuáles son las cantidades de leche en el estómago para su desarrollo.
En este sentido, la profesional indicó que los primeros días de producción de leche de una mamá se llama calostro, que genera muy poca la cantidad. El calostro proporciona todos los nutrientes y líquidos que su recién nacido necesita en los primeros días, así como muchas sustancias para proteger al bebé contra las infecciones. Su color y espesor se deben al hecho de que es más alto en estos factores de protección. (Comparado con la leche humana más madura, el calostro también tiene un alto contenido de proteínas, un poco menos azúcar y considerablemente menos grasa).
Si bien, la madre puede sentir que sus senos no están llenos el día en que da a luz, ya tiene suficiente calostro para alimentar al bebé. Su cuerpo producirá calostro durante varios días después del parto, hasta que la leche aumente en cantidad y se vuelva más cremosa o blanca, un período de tiempo al que las madres se refieren como que la leche está «bajando».
“Es muy poca la leche que sale al principio, es por eso que les decimos a las mamás que no se asusten. Además, la capacidad gástrica del bebé recién nacido es pequeña por lo que le alcanza con el calostro, hasta que a la mamá le baja la leche”, explicó Carmona. A la vez indicó la importancia de la toma del calostro, su frecuencia y que, además, la succión estimula la producción de leche.
Por último, la profesional remarcó que es muy importante la educación que se le brinda a la madre durante el embarazo ya que con la información correcta la madre sabrá qué pasará en el momento del nacimiento, lo fundamental del contacto piel con piel con el bebé.